Entrada de La Imagen de la Virgen de Fatima |
El 28 de Octubre de 2012 en el Colegio Seminario Menor Diocesano de Chiquinquirá, se llevó a cabo por segunda vez el Día con Jesús y Maria. En esta oportunidad más de cien personas venidas especialmente de Simijaca, Barbosa,
Puente Nacional (Departamento de Santander) de Chiquinquirá e incluso de Bogotá, se dieron cita para participar en este bendecido encuentro.
Obra de Teatro "La Conversión" |
En esta ocasión se llevaron a cabo presentaciones teatrales y conciertos que buscan evangelizar recurriendo al Arte, a la Estética y a la Belleza. En la tarde, se aprovecho la venida de la Orden Primera de los Heraldos del Evangelio para apoyar la increible obra de restauración de la Iglesia de la Renovación y el pozo de la Virgen emprendida por el Padre Jaime Monsalve, Párroco de la Renovación. El concierto Se llevo a Cabo en la SALA DE LA RECONCILIACIÓN de la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá con la sabia guía y explicación del Padre de los Heraldos del Evangelio, Juan Francisco Ovalle.
Sala de la Reconciliación. Basilica de Nuestra Señora de Chiquinquirá |
De igual forma se consagraron a la Virgen 6 personas, habitantes de Chiquinquirá, Simijaca y zonas anexas a la Región.
Terciarios de Bogotá, Chiquinquirá y nuevos Consagrados |
Los terciarios Fernando Ovalle y su esposa Juliana Mendieta, junto
con las 8 consagradas entre ellas las Sras.
Myriam Rivera, Martha Lucía Montaño, Viviana Pardo, Marina Murcia,
Martha Hernández, Nora Solano, Yamile Cañón, prepararon con entusiasmo este evento, que contó
con la participación de un grupo de seminaristas de Los Caballeros de la
Virgen que vinieron a solemnizar la Eucaristía que fue celebrada por el
P. Daniel Mirasierras E.P., en una fiesta tan especial como es la de
Cristo Rey.
En la homilía, el Padre dijo que para que Cristo reine en el mundo es
necesario que primero reine en nuestros corazones y para eso es
necesario que le abramos la puerta. En Sao Paulo (Brasil) hay una tumba
en el cementerio de la Consolación, con una figura preciosa en bronce y
tamaño natural de Nuestro Señor que toca la puerta de una casa, símbolo
de nuestro interior, que no tiene cerradura por fuera porque nuestra
alma se abre es por dentro.
Colocación de Rosario por la Sra. Martha Hernández |
Coronación por la Sra. Nohora Solano |
La corona fue colocada por la Sra. Nora Solano y el Rosario lo coloco la Sra. Martha Hernández.
Posteriormente hubo adoración con el Santísimo Sacramento, con cantos
en gregoriano, incienso. El Padre Wilker Maldonado, que es Vicario de
la Catedral del Sagrado Corazón, pronunció unas preciosas palabras sobre
Cristo Rey.
A continuación vimos un video explicando la expansión de los Heraldos del
Evangelio en el mundo y pudieron escuchar las palabras del fundador
Mons. Juan Clá Días.
Acabada la misma, la Dra. Sofía Suárez, habló de las actividades que se han realizado. Entre esto se destaca
que ya se tienen 10 Oratorios del Inmaculado Corazón de María, en
trescientas familias. Se ha ido en varias oportunidades a la Cárcel
a llevarles ayudas materiales y espirituales, invitados por el Párroco
Guillermo González, que también estuvo en el Día con María; han
repartido mercados y ropa en lugares bien pobres, además de llevarles
auxilio espiritual. Se realizan todos los primeros sábados, en la
Catedral del Sagrado Corazón, con el apoyo del joven y dinámico P.
Wilker Maldonado, el santo rosario, meditación, comunión y confesión,
que es lo que pide Nuestra Señora en Fátima.
Para cerrar la mañana de esta convivencia con Jesús y María, los jóvenes
seminaristas de los Heraldos Del Evangelio (Caballeros de la Virgen), Nos deleitaron con hermosas interpretaciones musicales en homenaje a María, que
causaron gran entusiasmaron entre los presentes.
Al concluir una señora dijo: “Qué pena que se haya acabada esta
actividad, estaba tan preciosa, con tanta alegría y paz”.
Dos señoras
protestantes comentaron: “no queríamos venir pero fuimos misteriosamente
atraídos, y estamos encantados, valió la pena y compraron varias
imágenes y recuerdos de la Virgen”. Otra señora nos decía: “Tienen que
ir a Simijaca, queremos abrir varios Oratorios”.
Antes de retornar a Bogotá el grupo de terciarios y del Seminario
pasó a visitar a Nuestra Señora de Chiquinquirá en su preciosa Basílica y
aprovechó para agradecer su protección, ya que al viajar
para ayudar en esta actividad evangelizadora, en el camino vieron un
arco iris intenso y precioso como si fuera un indicativo de la alianza
del Cielo con este apostolado.
Aprovechamos para felicitar y agradecerle a los Heraldos Del Evangelio (Caballeros de la Virgen), que vinieron a acompañarnos. Agradecemos a las consagradas, a los nuevos consagrados, al
Colegio Seminario, a los sacerdotes y a todos los que participaron.
Fue
una tarde inolvidable llena de gracias y bendiciones que nos anima a
seguir siempre para adelante. En una próxima ocasión, seria esperamos contar con su presencia.
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